18 de diciembre de 2020

Ida y vuelta

Sobre qué voy a escribir? A ver... pensá! Si empecé a ver How I Met Your Mother por 5ta vez en mi vida, de qué otra cosa puedo hablar?

Ultimamente estuve pensando en la constante: ese concepto que me inventé hace años para explicar un balance hipotético que existe entre cosas positivas y negativas que me pasan. En este caso puntual, compensando una buena racha con una mala.

La buena racha venía de la mano de victorias que asumí prematuramente como consumadas, y con esa misma definición se sobreentiende de donde viene la mala racha. Algo parecido me viene pasando con la cuenta bancaria... "Tranqui, todavía tengo bastante guita" y de un día para el otro estoy cambiando dólares para llegar a fin de mes (exagero, por suerte no llegué a ese punto). 

Si dejo de tipear, paro la pelota y pienso un toque... me doy cuenta que el término "racha" es exagerado o simplemente una excusita para camuflar la importancia de 1 persona y esconderla en un grupito. Como que no quiero aceptar que fue ESE cross-over (digno de MJ) el que me rompió la cadera como a Bryon Russel. 

Es que me parece cruel dejar fermentar una ilusión así en un pibe que lleva años esperando que dejes a tu novio, y le canceles faltando nada mas que 4 horitas para conseguir el anillo. Si, ya sé... esperar a mi manera, no? Como esperé siempre: haciendo zapping entre canales de relleno mientras espero el partido de Boca por la Libertadores. 

Y perdimos la ida, espero ganar en la vuelta.



2 de agosto de 2020

Punto y aparte

Si nunca pude aprender a manejarlo, menos voy a poder ahora, no? 
Ahora que soy un "viejo" de esos que tienen sus mañas arraigadas como un koala a la rama de un eucalipto. 


Y me refiero a mí incapacidad de relajar y dejar fluir. Esa costumbre que tengo de asfixiar hasta el hartazgo por un poquito de dopamina. Obstinación. Suelo decirme que es parte de mí, de mi forma de ser, de mi personalidad. Pero sinceramente no me molestaria poder cambiarlo... 
O no, qué se yo? Me gusta pensar, también, que en una condición de correspondencia absoluta voy a encontrar a alguien que valore esta constancia (wow, es loco cómo los sinónimos hacen que un mismo concepto sea positivo o negativo).

Si la 505 se ocupara de manera definitiva, abrazar esa perseverancia sería parte del contrato? Capaz ese sea el motivo por el cual no la puedo alquilar. 

Arabella tiene su frase particular para hacermelo ver: "Siempre queriendo tener certeza de todo vos". Y sí, me lee como un libro, cómo si me conociera hace casi 10 años. (Si lees esto, mándame un "hola morox". No estaría mal).

En fin, hoy usé muchos "punto y aparte". Es el inconsciente tratando de cerrar ideas -o capítulos-. Bueno, encontramos el título de hoy.

9 de junio de 2020

505

La historia se repite y no es ningun descubrimiento. Cíclicamente me toca transitar ésta ruta de sentimientos (mezcla de amargura, impotencia y un toque de resignación) con el pecho medio acongojado. A intervalos variables que van desde semanas hasta años, pero vuelve a pasarme una y otra vez. Es increíble. En escenarios diferentes, con nuevos personajes, con condiciones que parecen distintas a las veces anteriores pero el resultado termina siendo over and over and over again el mismo de siempre. Antes me reía del meme que decía que esta mala suerte es por la cadena de mail que no reenvié cuando tenia 13 años, hoy la sonrisa se desdibuja porque me lo empiezo a tomar un poco mas en serio.
Y claro, me pregunto "Hasta cuando?" Cuando hago las cosas mal, es porque hice las cosas mal. Cuando hago las cosas bien, es porque hice las cosas demasiado bien. Es como si independientemente de lo que haga el final estuviera escrito de antemano. Bajé las expectativas, conocí gente nueva, fui paciente, dejé todo, mentí, creí, traicioné, reciclé el pasado, innové, pequé, cambié el enfoque, hasta resignifiqué canciones y no lo podía creer.
"Siento que cada canción me habla de vos" tiré del tintero hace unos cuantos años (10?) y sigo sintiendo un poco de eso. Lo que me preocupa es que todas las canciones vienen con un final de mierda.

Ya no tengo ni para el envido, hermano. Ni ganas de mezclar.
No creo más en cuentos de hadas. Ya no.
Ninguna parece ser la útlima página en este puto libro de arena.
28 años en tablas y con la reina en jaque.
Buscando nuevas puertas en viejos ojos que no cambian.
Tratando de ponerle la 10 a cualquiera, y esperando que juegue como Román.
Tomando el Urquiza desde Roma a Tracia, tan solo para darme cuenta que no soy un pez gordo.
Buscando el oasis en una hotel-suite.
Haciendo foco en la señal de los dos, a pesar de que a veces, la incertidumbre es una constante.
Ni Allie, ni Noah, ni Sherlock, son tan personajes como yo.
De una pésima noche al día mas triste de la vida.

505, hermano, 505.

17 de enero de 2020

Romeo, romero, birra...

Nunca elijo el título de la entrada antes de escribirla por completo. Por lo general surge de algún momento fuerte de la misma y queda... Veamos que pasa hoy, que ni siquiera me decanto sobre que escribir.

Ok, acá vamos.

No, para. No me decido. Me cuesta tanto en este blog como en la vida real. 

A ver... No es que sea una decisión difícil, claramente la respuesta está a la vista. Una me elige y la otra no, colta. Pero me cagan a piñas las dudas en todo momento. Será Madrid que me pone un poco pelotudo, o ciego?

Me pasan muchas cosas, y no me alcanza LA internet en su inmensidad para expresarlo. Soy consciente de las decisiones que tomo, y me hago cargo. Incluso si me equivoqué no dudaría un segundo en reconocerlo. Pero este presente no fue mí decisión, yo solo necesitaba algo de espacio, distancia... Una placita de distancia, para armar mí picnic en LP. Y me dio Central Park, El Retiro, Parc Güell y Luxemburgo... Todo junto.

Y terminé transpirando ansiedad de saber algo, de tener una idea de que está pasando, y ésta distancia (real, de un océano) me juega en contra ahora porque no tengo los medios para achicarla. Es una pelea de egos en el fondo, y yo ya sé que no es mi deporte.

Dando vuelta la hoja, tengo la historia que esperé toda mí vida. Una mujer inteligente, buenísima, hermosa, capaz, talentosa, que me quiere honestamente, que me hace sentir real, presente, hombre. Pensé que iba a venir un "pero", pero no... Es que no hay vuelta, es ella. Es Belu. Todo lo demás se apaga cuando empieza a brillar, TODO! Es como tratar de ver las estrellas en el cielo de NYC, suerte con eso... Si pensas que el Empire State te encandila, nunca escuchaste a Belu pronunciar la "rr" en birra... Te hace olvidar que chocaste el auto y que hay 10mil km entre Madrid y Buenos Aires. 

No hay nada más que agregar. Me quedo con esta página. Espero que sea la última.